Calificación de Riesgo
La Calificación de Riesgo es un indicador que ilumina al mercado, a los inversionistas y a los clientes, sobre la capacidad de una empresa para afrontar obstáculos y desafíos que pueden presentarse a futuro.
Operaciones Bursátiles
| Saldo al 31/diciembre/2021 | Gs. 93.000.000.000 |
| Total emitido | Gs. 137.800.000.000 |
Nuestra calificación
| Fecha de corte | 31 de diciembre de 2021 |
| Categoría | pyA- |
| Tendencia | Fuerte |
A: Corresponde a aquellos instrumentos que cuentan con una buena capacidad de pago del capital e intereses en los términos y plazos pactados, pero ésta es susceptible de deteriorarse levemente ante posibles cambios en el emisor, en la industria a que pertenece o en la economía.
“La calificación de riesgo no constituye una sugerencia o recomendación para comprar, vender, mantener un determinado valor o realizar una inversión, ni un aval o garantía de una inversión o su emisor.”
Categoría y Tendencia
La Tendencia mejorada a FUERTE (+) refleja las favorables expectativas sobre la situación general de IBISAECA, debido al mejoramiento de los indicadores de solvencia, endeudamiento y liquidez, fortalecidos por el aumento del desempeño financiero y operativo en el 2021, reflejando una recuperación luego de la recesión económica del 2019 y de la pandemia del covid-19 en el 2020, que afectó directamente a su segmento de clientes.
Asimismo, se ha evidenciado el fortalecimiento de los aspectos cualitativos de la gestión operativa, relacionados principalmente con el ambiente de control interno y la gestión crediticia, logrando un importante incremento de las tasas anuales de cobranzas, comparado con los años anteriores.
Igualmente, un factor que refleja la favorable expectativa del negocio consiste en la diversificación de la cartera crediticia, incorporando otros productos y segmentos de clientes, como las pymes y los préstamos de consumo, lo que ha generado una menor exposición de los activos al riesgo crediticio.
Principales Fortalezas
- Aumento de la solvencia patrimonial.
- Disminución del endeudamiento y el apalancamiento financiero.
- Mejoras cualitativas en la gestión del negocio.
- Aumento de la liquidez.
- Aumento de la eficiencia operacional.
- Aumento de los márgenes de utilidad.